¡Hola a todos!. Esta semana os traigo nueva información acerca de los rincones, los circuitos y los ambientes de aprendizaje para elaborar una clase de EF en Educación Infantil. Os iré presentando las características de cada uno para que os sea más fácil su elaboración.
RINCONES:
Los rincones son espacios delimitados y concretos que vamos a situar en la propia clase. De este modo, el docente coloca materiales o recursos en diferentes espacios de la misma, con objetivos de aprendizaje diferentes. En estos rincones, los alumnos se organizan en grupos que trabajan simultáneamente en actividades diferentes. Habitualmente escogen la tarea que van a llevar a cabo, se planifica el trabajo y el tiempo y se preparan para realizarla.
Gracias a los rincones damos respuesta a los diferentes intereses, diferencias y ritmos de aprendizaje de nuestros alumnos. Lo que conlleva que el niño participe de forma activa en la construcción de su aprendizaje.
Para organizar los rincones tenemos que tener en cuenta que tienen que trabajar en pequeños grupos, no más de cinco alumnos y poner un máximo de rincones en función de los alumnos, pero es conveniente no sobrepasar los seis rincones. Ya sabéis, que el espacio que disponemos no es muy grande y los niños tienen que trabajar con soltura y poder moverse por el espacio libremente.
Hay que compaginar rincones en los que los niños puedan trabajar de forma autónoma y otros en los que se requiera la presencia del profesor y siempre que sean acordes a la edad de los niños.
Para ello, las actividades deberán ser muy sencillas, pero muy motivadoras y divertidas. Recordar que se trata de un juego y que a los niños les tiene que parecer interesantes y curiosos para que se motiven.
Cada rincón debe tener el material necesario, nunca cargarlos de más ni poner muy pocos, puesto que los primeros pueden despistar a los niños y no saber muy bien con que trabajar y los segundos pueden limitar la actividad. Los materiales tienen que estar a disposición de los niños para que puedan jugar y ser asequibles a los pequeños. Les recordaremos las normas de respeto a los materiales y compañeros y por supuesto debemos de comprobar el material con el que trabajan los niños evitando poner material deteriorado.
Los rincones deben estar bien señalizados para que los niños sepan en todo momento qué tienen que hacer y dónde se encuentran. De tal modo que si un niño tiene que ir al baño o a beber agua cuando regrese sepa dónde colocarse de nuevo. Pueden estar decorados con dibujos que hayan realizado los niños en clase, lo que personaliza más los rincones y los sientes como parte suya.
En los rincones podemos utilizar todo tipo de materiales, disfraces, haros, plastilina...etc. todo aquello que sepamos a los niños les gusta y les divierte.
Para comenzar a jugar, cogeremos a los niños y les iremos explicando los diferentes rincones, posteriormente los distribuiremos y el profesor sólo se quedará en aquella actividad en la que el juego requiera una serie de reglas y tengan que ser explicadas, ya sabéis que el alumno debe ser el protagonista de su aprendizaje.
Todos los alumnos deben trabajar a la vez en cada rincón, no pudiendo haber dos grupos en el mismo.
CIRCUITOS:

Al igual que el apartado anterior, los circuitos permiten a los niños trabajar y alcanzar los objetivos marcados con éxito. Son muy versátiles y se pueden cambiar fácilmente, manteniendo a los niños interesados y activos en la tarea a realizar. Esta actividad puede realizarse tanto en interior como en exterior, todo depende de las instalaciones y de los materiales que tengamos. Ahora que va haciendo fresquito por las mañanas viene muy bien hacerlo en el interior, pero cuando llega el buen tiempo, las actividades se pueden realizar en el patio.
El espacio es muy importante como ya hemos visto y lo ideal sería disponerlo en circulo, para que no haya embotellamientos y los niños puedan correr y circular por ellos con libertad de movimiento.
En los circuitos, también tenemos que determinar el número en función del ratio de alumnos que tengamos, como ya hemos dicho 5 o 6 sería ideal para una clase de 25 alumnos por ejemplo.
En cada estación se realizará un tipo de actividad, acorde siempre a la edad de los pequeños. Podemos realizar circuitos que lleven a cabo ejercicios motores como: lanzamientos, recepciones, giros,bailar,saltar... acompañados de todo tipo de material: bancos, colchonetas, aros, pelotas...etc. Tan solo debes elegir las actividades en función al tema que quieres desarrollar en clase o que estás tratando (cuerpo humano, flores, amistad, confianza) y que dichas actividades reflejen las habilidades y movimientos que quieres que los niños desarrollen en tu clase de EF, para conseguir un desarrollo integral.
Los niños se colocarán en fila e irán pasando por las distintas actividades en grupo y conforme llegamos a una actividad vamos explicandolo.
Los circuitos se llevan a cabo del siguiente modo:
cogeremos a todos los alumnos y los llevaremos al primer circuito donde les explicaremos su realización, una vez hecho, pasamos al siguiente circuito.
Existen dos formas de llevar a cabo los circuitos:
1. Podemos realizar todo el circuito a la vez.
2. Podemos realizar la actividad muchas veces, es decir, repetirla varias veces y después de unos minutos o de haberla realizado dos o tres veces, que se vayan a la actividad siguiente y que los niños repitan el mismo proceso.
AMBIENTES DE APRENDIZAJE:

La organización del espacio, los materiales y la decoración es muy importante. De nuevo el niño será el protagonista de su aprendizaje y el papel del maestro se queda en un segundo plano, organizando y guiando su aprendizaje. Recordar que hay que dejar libertad a alumno.
Normalmente los ambientes de aprendizaje se realizan como evaluación inicial para comprobar los conocimientos de los alumnos o como evaluación final para comprobar los conocimientos que han adquirido a lo largo de las clases. La información que se les ofrece a los alumnos es escasa, para que sean ellos mismos quienes tomen sus decisiones, nosotros los guiaremos en función a sus respuestas. El alumno no sabe ni el qué, ni el cómo ni el cuándo tiene que hacerlo.
Sea cual sea la opción que elijamos, deben estar decorados de tal modo que inviten por sí solos a los niños a jugar, utilizando colores llamativos, tareas con diferentes niveles de dificultad, para que aquellos niños que vayan superando un nivel se motiven, al tiempo que superan sus dificultades. Jugar con variedad de materiales y combinaciones posibles para hacerlos más atrayentes. Cada espacio nos ofrecerá diferentes características que debemos aprovechar.
Se pueden utilizar diferentes ambientes en una misma sesión, por ejemplo si queremos enseñar las estaciones podemos decorar cada ambiente con una estación.
Todo debe estar bien señalizado y de fácil acceso, para que los niños sepan por donde deben entrar por donde salir y hacia dónde dirigirse.
Los materiales deben ser de fácil acceso para los niños y por supuesto repartidos por todo el espacio. Siempre serán revisados y seguros para los pequeños, evitando posibles caídas y que algún material pueda desestabilizarse y dañar al niño, así que se debe probar siempre su seguridad y revisar toda la actividad.
Como hemos podido observar cualquiera de los recursos anteriormente mencionados contribuyen al aprendizaje del alumno, pueden llevarse a cabo con las temáticas que queramos, pero siempre respetando el principio de motivación. Acordaros de recordar las normas de respeto a materiales y compañeros y a la hora de ser recogidos podeis contar con la colaboración de los alumnos haciéndoles responsables de cada material, lo que reforzará su autoestima, incluso podéis contar con la colaboración de los niños para montar las sesiones. Aunque en muchas ocasiones en función del tiempo que dispongais, es conveniente tenerlo ya montado, eso lo dejo a vuestra elección.
Espero que os haya gustado esta entrada y que os sirva para futuras clases.
Un saludo a todos y nos vemos la semana que viene, hasta entonces ¡HOY SÓLO TOCA SONREÍR!